Hèctor Luis Zarauz Lòpez escribiò el libro Valentìn Elcoro e Hijos. Historia de una vida Empresarial. En èl hace una reseña de la vida de un empresario ejemplar, como lo fue Valentìn Elcoro. Funda en 1861 Valentìn Elcoro y Compañìa junto con su hermano Esteban. En 1881 constituyen con Esteban una sucursal en San Luis Potosì. Esta empresa fabricaba carruajes y ademàs importaba metales. En 1882 se asocia con Juan B. Etchegaray y Juan Laspiur. Hacia 1886 un grupo de inversionistas, algunos de origen español, crean el Banco de Londres y Mèxico. Entre estos empresarios estaban: Tomàs Braniff, Juan Llamedo, Ignacio de la Torre y posteriormente, Ìñigo Noriega, Leòn Signoret y Valentìn Elcoro. Esta sociedad bancaria se originò a partir de la adquisiciòn del Banco de Londres y Mèxico y Sudamèrica. De hecho el Banco de Londres y Mèxico aumentò su capital social a 15 millones de pesos hacia 1899 y contaba con sucursales en varias ciudades del paìs. Ademàs participaba en el financiamiento de grandes obras como la introducciòn del drenaje en la ciudad de Mèxico, o en la explotaciòn chiclera y maderera en los territorios de lo que hoy es el estado de Quintana Roo. Valentìn tendrìa en los años siguientes un papel importante en esta instituciòn financiera, ya que fue accionista fundador, miembro del Consejo, por lo menos desde 1906, cuando fungiò como vocal y hasta director. En los inicios del siglo XX, la direcciòn correspondiò a Manuel Gonzàlez de Cosìo; y entre otros miembros, se encontraban Francisco Espinoza, Rafael Dondè, Remigio Noriega, Leòn Signoret y otros empresarios de origen español. La conducciòn a cargo de empresarios de origen español se mantuvo incluso en los años de la Revoluciòn Mexicana. Fueron directores del banco entonces: Josè Barroso Arias, Josè Sànchez Ramos y Valentìn Elcoro, quien presidiò el Consejo de Administraciòn durante la difìcil coyuntura huertista en 1913, debido al fallecimiento de Manuel Gonzàlez de Cosìo quien en esos dìas habìa estado al frente del Consejo. Victoriano Huerta pretendiò cobrar un impuesto de guerra del 15% sobre los depòsitos bancarios; ello propiciò gran inestabilidad y retiro de enormes fondos. Ante una posible situaciòn de insolvencia, por parte de las instituciones bancarias, el propio gobierno determinò el cierre temporal de estas instituciones a fin de evitar las fugas de dinero. Valentìn Elcoro debiò reunirse con los miembros del banco, Remigio Noriega, Josè Sainz, Leòn Signoret y Rosendo Pineda, para tomar esta difìcil disposiciòn. Con el paso de las semanas esto se fue normalizando. Otro campo empresarial fue el de los explosivos, para la industria de la construcciòn y la minerìa. Tambièn invirtiò en una fàbrica de cerveza que no tuvo mucho èxito. Funda la Compañìa Nacional de Clavos, empresa que fue muy exitosa. Estuvo en el negocio de los bienes raices. ” Todas las inversiones y campos empresariales en los que habìa incursionado Elcoro, muestran que se habìa convertido en un empresario consolidado. Su fortuna se habìa forjado a fuego lento, en el curso de años de trabajo constante, en los que mantuvo siempre una actitud tesonera de laboriosidad, combinada con cierta audacia para arriesgar en sus inversiones”. Fuente: Valentìn Elcoro e Hijos. Historia de una vida empresarial. Hèctor Luis Zarauz Lòpez.
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